El género no es una ideología, es una cuestión sobre la que se está tomando conciencia gracias a una serie de estudios científicos llamados estudios de género, los mismos que analizan la estructura de nuestras sociedades desde la perspectiva de las espectativas culturales y las relaciones de poder.
Las implicaciones de los estudios de género son muy vastas, sin embargo - y simplificando mucho-, se puede afirmar que a lo largo de los últimos cuarenta años los estudios de género se han dedicado a identificar, analizar y clasificar las espectativas y relaciones antes mencionadas, mostrando como muchas situaciones que tienden a ser consideradas normales o naturales sean en realidad fruto de la cultura y de las convenciones sociales.
Las implicaciones de los estudios de género son muy vastas, sin embargo - y simplificando mucho-, se puede afirmar que a lo largo de los últimos cuarenta años los estudios de género se han dedicado a identificar, analizar y clasificar las espectativas y relaciones antes mencionadas, mostrando como muchas situaciones que tienden a ser consideradas normales o naturales sean en realidad fruto de la cultura y de las convenciones sociales.
La cuestión de género no tiene nada que ver con la ideología, no obstante, muchos grupos de la sociedad tratan de presentarla como tal, conduciendo contra ella batallas basadas en el temor. Algunas de las «desgracias» más anunciadas son la eliminación de la diferencia entre los sexos, la criminalización del hombre en cuanto tal y el deseo de cambiar los valores sobre los que se funda la sociedad.
Quieren eliminar la distinción entre los sexos
De ninguna manera, además es imposible, lo que se añade es la variante del género evidenciando que la visión según la cual en el mundo hay sólo hombres y mujeres es incompleta y no tiene nada de natural. Si el sexo y el género concuerdan, hay una identidad de hombre o mujer, pero cuando género y sexo no concuerdan -y es algo que sucede muy a menudo- lo que hay es una serie de indentidades intermedias.
Incluir la cuestión del género en la visión de la sociedad significa dejar de criminalizar a todas las personas cuya identidad de género no coincide con el sexo biológico.
Quieren criminalizar a los hombres
Absolutamente no, simplemente se trata de comprender que la estructura de la sociedad en la que vivimos es patriarcal, o sea que el poder lo tienen y lo administran los hombres. No es así siempre y no lo ha sido en la historia, hay muchos ejemplos en el pasado y en algunas regiones del mundo de sociedades matriarcales o de sociedades con una distribución de poder inclusiva y cada modelo tiene ventajas y desventajas. Tomar conciencia de esto significa discutir públicamente sobre los roles que la sociedad asigna a hombres y mujeres, dejando de aceptar los mismos como naturales.
En la cotidianidad quiere decir enseñar a los párvulos que si bien haya claras preferencias de muchos niños por los autos y de muchas niñas por las muñecas, cuando un niño prefiere las muñecas y una niña los autos no hay nada que corregir.
En la vida profesional significa no tomar como natural que si dos personas hacen el mismo trabajo, una gane menos por ser mujer.
En los hogares significa crear conciencia que las faenas de casa pertenecen a todos y que si mamá gana más que papá no hay problema.
En la sociedad significa no dar la culpa a las mujeres cuando los hombres las violan, enfatizando la necesidad de educar a los hombres a no agredir, en vez de educar a las mujeres a protegerse.
Quieren cambiar los valores de la sociedad
Eso sí, y menos mal, porque si los valores de la sociedad fueran inmutables viviríamos aún en sociedades donde una persona puede ser vendida como esclavo, o donde es legal un asesinato en nombre del honor. La naturaleza no se puede cambiar, la sociedad sí.
Nota del 20/10/2017: a pedido de algunos lectores agrego a continuación algunos enlaces a bibliografías comentadas sobre la cuestión de género.
- Universidad de Buenos Aires
- Universidad Carlos III de Madrid
- Instituto Nacional de las Mujeres - México
